domingo, 25 de septiembre de 2011

¿QUÉ HACER PARA EL DOLOR Y LA INFECCIÓN DENTAL?



Un dolor de diente o dolor de muela suele ser el resultado de caries dentales o algunas veces de una infección. 

La caries dentales a menudo son causadas por una higiene dental deficiente, aunque la tendencia a padecerlas es en parte hereditaria.

La boca contiene múltiples bacterias pero están en equilibrio, por lo tanto, no causan daño, pero cuando ese equilibrio se rompe se produce el proceso infeccioso.

Nos puede causar muchos problemas, es decir las infecciones dentales nos pueden causar dolor de muelas y dolores de cabeza. 

Estos procesos infecciosos ocurren cuando una bacteria se vuelve virulenta o cuando el estado general del paciente no permite dicho balance.

Entre estos estadios se encuentran las anemias, malnutrición, estrés, alcoholismo, tomar corticoides, así como la diabetes y VIH, que hacen más propensos al individuo.

Entre los principales síntomas están el dolor, la hinchazón del rostro, la dificultad para abrir la boca, pasar alimentos o respirar, las infecciones dentales pueden ser leves, moderadas y severas, según el caso se da el tratamiento. 

Los constantes malestares de la muela causan dolor de cabeza.

El tratamiento consiste en eliminar el foco infeccioso mediante la extracción de la pieza que causa el dolor de muela o limpieza del nervio (endodoncia).

Además, se drena el material purulento si lo hubiera y se prescribe medicación con antibióticos.

Dependiendo del caso se pueden manejar en el consultorio en forma ambulatoria o procedimientos en sala de operaciones bajo anestesia general.

Entre las enfermedades infecciosas más comunes están la periodontitis, la osteítis periapical, celulitis y el absceso.

Se debe inculcar desde niño el realizar una buena cepillada de dientes.

Con el fin de evitar futuras infecciones dentales, que de complicarse causan dolores de muelas y dolores de cabeza que pueden ser insoportables, por tan desagradables molestias constantes.

Lo más importante es prevenir este tipo de infecciones dentales, manteniendo una buena salud oral mediante la higiene y visitas periódicas la dentista.

Si se presentara algún síntoma que le cause incomodidad acuda lo antes posible a su odontólogo para solucionar su problema.

Para evitar dolores en el futuro como los dolores de muelas o de cabeza es recomendable una buena higiene dental.

Además es muy importante recordar, evitar siempre de automedicarse, pues lo único que hace es agravar el problema y alargar la cicatrización.

En el peor de los casos podría ocasionarle una ulcera gástrica.

La primera causa de infecciones dentales, son las caries no tratadas.

Las caries no tratadas pueden penetrar la encía, hasta llegar al nervio del diente, causando una infección seria que causa mucho dolor e hinchazón.

Una caries no tratada puede derivar en una infección que afecte los tejidos circundantes, situación que en ocasiones puede llegar a derivar a la muerte si afecta al cerebro o debido a impedimentos para respirar. 

Lo recomendable es hacer un tratamiento de conducto y extraer el diente afectado.

El tratamiento con antibióticos también es recomendable en estos casos. 

La segunda causa más común de las infecciones dentales es por una encía no tratada o periodontitis.

Las encías no tratadas pueden conllevar mucho dolor, hinchazón, sangrado, perdida del hueso que rodea los dientes, mal aliento y eventual pérdida del diente.

El tratamiento que se recomienda es una limpieza profunda, cirugía y extracción de los dientes intratables

La tercera causa más común de infección es por lesiones o traumas causados por golpes. 

Este tipo de traumas pueden causar que el nervio vaya muriendo gradualmente y se vaya infectando.

Una forma de detectar esto temprano es prestando atención si la dentadura está extremadamente sensible al frío o si cambia su color a marrón.

El tratamiento recomendado es realizar una endodoncia o un tratamiento de conducto.

LOS DENTÍFRICOS Y CEPILLOS DENTALES



Los dentífricos son aquellos productos (cremas, pastas, soluciones, polvos) que se utilizan para la limpieza de la dentadura, y generalmente acompañan al método de cepillado.

Los dentífricos son conocidos como pastas de dientes y desde antaño se han usado para contribuir a la limpieza de los dientes.

Hasta hace pocos años, de los dentífricos, el efecto cosmético era el más considerado, pero los avances tecnológicos ha hecho que en ellos se incluyan substancias con efectos terapéuticos.

Por ello, hoy en día existen en el mercado gran cantidad de dentífricos con efectos diversos sobre las piezas dentarias y las encías.

Es importante destacar, sin embargo, que sin un buen método de cepillado, la acción de los dentífricos es ineficaz.

Si se tiene la boca sana y se visita al dentista con regularidad, se puede seguir usando la misma pasta, haciendo caso omiso a lo que digan los anuncios publicitarios.

Si le han prescrito o ha adquirido un dentífrico, podrá saber por su composición las indicaciones precisas del mismo y si su uso debe o puede ser utilizado por toda la unidad familiar.

Error que suele suceder ya que en general los dentífricos usados deben ser distintos según las edades y según las tendencias patológicas bucales.
 
Así por ejemplo, no utilizará el mismo dentífrico una persona que sus dientes no soporten el agua fría que otra que le sangren las encías.

La eliminación de la placa bacteriana se realiza por medios mecánicos.

Hemos visto que está adherida y con un cepillado adecuado la desprenderemos de la superficie dentaria.

También comentamos que cuando está calcificada es competencia del Odontoestomatólogo o Higienista Dental su eliminación.

Por lo dicho anteriormente, cabe pensar que los dentífricos serian innecesarios para realizar la higiene dental y en realidad hay técnicas que desechan el uso de dentífricos y preconizan el uso exclusivo del cepillo dental.

Podemos obviar los dentífricos en algunas ocasiones, pero debido a los efectos terapéuticos que poseen, creemos que se deben usar en la mayoría de los casos.

Existen en el mercado gran cantidad de dentífricos

COMPONENTES DE LOS DENTIFRICOS

Los dentífricos están compuestos por diferentes substancias y cada una de ellas tiene una función diferente.

SON LAS SIGUIENTES:

Detergentes Abrasivos Humectantes o humedificantes Aromatizantes y edulcorantes

Colorantes Conservantes y Anticorrosivos del tubo Substancias antiplaca bacteriana y anti cálculo




Substancias que aumentan la resistencia del esmalte Desensibilizantes Blanqueadores Antinflamatorios y Epitelizantes Enzimas Portadores de calcio Substancias naturales, vegetales

Los cepillos dentales son los mejores aliados para combatir la placa bacteriana, a la que nuestros dientes están expuestos.

Un cepillo dental posee un tiempo determinado de vida y de uso.

Antes los dentistas recomendaban cambiarlo cada tres meses, debido a la cantidad de bacterias que se acumulan en las cerdas y en el mango del objeto.

Los cepillos de cerdas suaves y de puntas redondeadas, suelen durar menos que las de cerdas fuertes.

Las primeras te ayudan si eres hipersensible de las encías y puedes hacer un masaje.

Recuerde que aunque logre controlar la sensibilidad, es recomendable que visite a su odontólogo para que identifique y dé solución a tiempo de la causa de su problema.

Aplicar una técnica adecuada y saber utilizar el cepillo dental nos facilitará el proceso de higiene de los dientes y asegurará la limpieza de todas las piezas.

Si usas un buen cepillo en buenas condiciones y laves tu boca en cada comida, gozarás de una dentadura perfecta y una sonrisa sana.

¿QUE HACER CUANDO UN DIENTE SE SALE DEL ALVEOLO POR UN GOLPE?






El término en odontología para un diente que cae o se sale por un golpe violento recibido es "avulsión dental".


Un diente permanente que se cae por un golpe algunas veces se puede reimplantar. 

En la mayoría de los casos, únicamente se reimplantan en la boca los dientes permanentes de los adultos; mientras que los dientes de los bebés generalmente no se reimplantan.

Se debe contactar al odontólogo inmediatamente cuando un diente se ha partido o se ha caído a causa de un golpe. 

Si se puede encontrar dicho diente después del accidente o la lesión, se debe llevar consigo cuando se busque asistencia médica.

Causas
Los accidentes dentales son comúnmente causados por:
-          Caídas accidentales
-          Trauma relacionado con el deporte
-          Peleas
-          Accidentes automovilísticos
-          Masticación de alimentos duros

Primeros auxilios

Se debe guardar cualquier diente que haya sido sacado por un golpe para realizar una posible reimplantación y llevarlo al odontólogo lo más pronto posible, ya que cuanto más se espere, menor será la posibilidad de reimplantarlo con éxito.

Se recomienda manipular el diente tomándolo por la corona (el borde que realiza la masticación).

Es conveniente utilizar una de las siguientes opciones para transportar el diente:

Tratar de colocar de nuevo el diente en su cavidad al nivel de los dientes adyacentes y morder suavemente una gasa o una bolsita de té húmeda para ayudarlo a mantenerse en su sitio.

Los dientes circundantes pueden utilizarse como anclas y se debe tener cuidado de no tragarse el diente.

En caso de que el diente no se pueda colocar de nuevo en su cavidad, se debe colocar en un recipiente y cubrirlo con una pequeña cantidad de leche entera o saliva.

El diente también se puede llevar entre el labio y la encía inferiores o bajo la lengua.

En el consultorio del odontólogo, se puede conseguir un dispositivo de almacenamiento para salvar un diente.

Dicho equipo contiene una caja para viajes y una solución líquida. Se recomienda comprar una de éstas para el botiquín casero de primeros auxilios.

En caso de primeros auxilios adicionales, se recomienda seguir estos pasos:

Aplicar una compresa fría para el dolor en la boca y encías.

Aplicar presión directa con una gasa para controlar el sangrado.

Buscar ayuda odontológica inmediatamente, ya que cuanto más rápido se reciba atención, mayores oportunidades habrá para un reimplante exitoso.

Las fracturas graves de dientes pueden dejar al descubierto el tejido nervioso ubicado en el interior del diente y, en estos casos, se necesita con más apremio la atención médica inmediata para evitar las infecciones, abscesos y dolor.

Las fracturas simples se pueden atender no necesariamente como una situación de emergencia, pero deben repararse para evitar los bordes afilados que pueden cortar los labios o la lengua y también por razones estéticas.

NO SE DEBE

NO SE DEBE manipular la raíz de un diente, sólo el borde con el que se mastica, el cual se conoce como corona dental.

NO SE DEBE cepillar ni limpiar el diente con alcohol o peróxido.

Es necesario acudir al odontólogo inmediatamente si:

Un diente permanente se ha caído por un golpe.

Un diente se ha fracturado parcialmente y se presenta dolor e hinchazón.

En caso de fracturas simples, puede solicitarse una cita con el odontólogo, no necesariamente de emergencia.
Después de un accidente mayor, como un accidente automovilístico o una caída grave, si el paciente no puede cerrar bien la boca y juntar los dientes, puede que la mandíbula esté rota, lo que requiere de atención inmediata.

PREVENCIÓN

Se debe usar un protector bucal al practicar cualquier deporte de contacto.

Se deben evitar las peleas o riñas.

Se recomienda evitar los alimentos duros como los huesos, el pan viejo y las roscas de pan endurecidas.